Madrigal de la Altas Torres
Cuando alquiles nuestra Casa Rural, tendrás un amplio abanico de posibilidades que podrás realizar y podrás vivir numerosas experiencias que podrás contarle a tus seres queridos.
En Madrigal de las Altas Torres tenemos un sin fin de peculiares rincones, podrás descubrir paisajes inolvidables, conocer parte de la historia de nuestro país y conocer mejor la etnografía que envuelve nuestra pequeña localidad.
El Palacio de Don Juan II
El palacio de Juan II, actual convento de Nuestra Señora de Gracia, fue morada real, al menos desde tiempos del rey Pedro I de Castilla, llamado “el Cruel” por sus enemigos y “el Justiciero” por sus vasallos.
El palacio, en sus primeros tiempos, parecería una casona hidalga de aspecto rural y sobrio, a pesar de lo cual fue elegido por Juan II de Castilla y su primera mujer, María de Aragón, como residencia. Fue entonces acondicionado el palacio para albergar la Corte, que se estableció ahí desde el año 1424 hasta el 1497, año en el que Isabel la Católica la traslada.
El palacio fue residencia real hasta que el emperador Carlos I lo donó a las madres agustinas, que ocupaban entonces el convento de Extramuros de Madrigal, aduciendo que usaban el palacio con poca frecuencia…
Iglesia de San Nicolas de Bari
En el centro de la villa se encuentra la iglesia de San Nicolás de Bari, fantástica representación del arte románico-mudéjar fue construida en el siglo XIII, época de absoluta vigencia del románico, y reformada en el siglo XV, cuando todavía el mudéjar mantenía su predominio.
Declarada monumento nacional el 3 de julio de 1931, en el exterior destaca la figura orgullosa de su enorme torre campanario, de 65 metros de altura.
Una vez en el interior, los juegos de luces nos hacen mirar al cielo y encontrarnos con un fabuloso artesonado de filigranas en puro nogal, situado dos metros por debajo del techo de la iglesia. Consta de tres naves y dos ábsides decorados con arquillos ciegos…
Bodega de los Frailes
Estamos ante una bodega monumental, por sus trazas y elementos arquitectónicos. Histórica tanto por la cronología de su construcción como por la datación milimétrica recogida en los libros de fabrica conservados por la Provincia Agustiniana de Castilla.
Los frailes del convento de San Agustín Extramuros de la villa de Madrigal, poseían riquísimas extensiones de majuelos. La variedad de uva trabajada era el verdejo. Cuando las bodegas del convento se quedan pequeñas para albergar la producción del vino, los friales deciden construir una nueva, para ello eligen la parte más alta del pueblo, junto a la “carra Medina”, donde la peña es más sana y fuerte y está exenta de humedades. Dicho terreno permite construir el lagar encima, para poder ahorrarse costes de transporte…
Sinagoga
Aunque nada queda ya que recuerde la existencia de la Sinagoga, parece ser que una de las grandes casas de Madrigal tuvo como función original servir de culto, oración y reunión a la comunidad judía de la localidad. Este edificio, que se encuentra en la parte más alta de la villa, mantiene sus muros en un estado de conservación excelente.
No tenemos constancia del momento en que los judíos se asentaron en Madrigal, pero en la época del Rey Juan II de Castilla constituían una comunidad relativamente amplia, muy próspera y con mucho poder.
Dedicados a negociar con productos agrícolas y pecuarios, y al prestamismo. Isabel dictó órdenes contra ellos, prohibiendo la usura y obligándoles a colocar estrellas de David en las rejas de sus casas y vestidos, en el año 1476. Poco después fueron convertidos al cristianismo…
Las Murallas
El recinto amurallado de Madrigal de las Altas Torres es una fortificación defensiva que rodea todo el centro urbano de la localidad. Constituye un ejemplo excepcional de arquitectura militar medieval y relevante testimonio del sistema constructivo mudéjar.
El conjunto de la muralla forma un perímetro ovalado irregular y alargado de oeste a este, debido a que fue adaptándose de los accidentes topográficos del terreno, cercaba una superficie de 39,04ha.
Tiene cuatro puertas orientadas a los cuatro puntos cardinales que reciben el nombre de las poblaciones a las que conducía.
El aparejo sigue el modelo Toledano de mampostería y ladrillo, aunque aquí la mampostería se sustituyo por tapial con machones y verdugadas de ladrillo que encuadran los tapiales de argamasa revocados en los entrepaños…